La desertificación es la degradación de las tierras de zonas áridas, semiáridas y subhúmedas secas, resultante de diversos factores tales como las variaciones climáticas y las actividades humanas, según la definición del artículo 1 de La Convención de Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (CLD).
Fue declarado oficialmente por la Asamblea General de las
Naciones Unidas como "Día
Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía" el 30 de
enero de 1995. Los objetivos de la celebración de este día son:
En nuestro país, contamos con el Programa
de Acción Nacional contra la Desertificación (PAND) que lidera el
Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. El objetivo fundamental del
PAND es contribuir al desarrollo sostenible de las zonas afectadas del
territorio nacional y, en particular, la prevención de la degradación de las
tierras y la recuperación de tierras desertificadas. Expone las propuestas
de acción para la lucha contra la desertificación en dos vías:
En HISPALFORM creemos que una aplicación conjunta de
las convenciones de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación,
sobre Diversidad Biológica y sobre Cambio Climático puede
proporcionar múltiples beneficios. El impacto del cambio climático mundial
sobre la desertificación es complejo y los conocimientos sobre la materia son
todavía insuficientes. Por un lado, el incremento de las temperaturas,
provocado por un aumento del nivel de dióxido de carbono (CO2),
puede tener efectos negativos al aumentar la evaporación del suelo y reducir
las precipitaciones en las tierras secas. Por otro lado, un incremento del
dióxido de carbono en la atmósfera puede potenciar el crecimiento de algunas
especies de plantas. En este sentido, aportamos la formación necesaria
para ayudar con nuestras acciones, tanto en el área familiar como en el entorno
laboral.